Elegir el juego adecuado que estimule las habilidades e inteligencia de nuestros hijos puede ser un verdadero reto. Las modas impuestas por la publicidad y el amplio abanico de juegos de entretenimiento puestos a disposición de los más pequeños pueden hacernos dudar sobre qué opción es la más apropiada.
En este artículo te mostramos algunos consejos que te ayudarán a elegir la mejor opción de juego educativo.
CONECTAR CON LAS NECESIDADES DEL NIÑO
Conocer bien a nuestro hijo (o bien sobrino, nieto u otro pequeño a quien queremos sorprender con un regalo) puede darnos una pista sobre sus aficiones, tendencias o puntos débiles, de modo que nos den una idea del mejor regalo educativo que podemos hacer.
Tal vez haya una asignatura o alguna área específica en la que el niño necesite un extra de motivación. ¿Por qué no explorar opciones por ahí?
POTENCIAR SUS VIRTUDES
Cuando es evidente cierta inclinación del menor hacia una materia, ciencia o cualidad artística, podría ser interesante encontrar un juego educativo que explote esa virtud.
¿Le atrae la música? Pues un instrumento musical o un juego relacionado con la música podría ser una excelente opción. ¿Le gusta el arte? ¿Es creativo? ¿Le apasiona mirar las estrellas? Ahí tenemos el camino para elegir el regalo que, además de entretenerle, potencie al máximo sus virtudes desde tierna edad.
CONSIDERAR LA EDAD DEL NIÑO
Puede parecer una obviedad pero lo cierto es que a veces se pasa por alto este detalle. Los juguetes educativos se deben ajustar a la edad y madurez del niño. En los propios juegos se especifica las edades para las que se han diseñado.
Hay que tenerlo en cuenta para no regalar un juego que les resulte demasiado fácil y aburrido. Pero tampoco decantarse por uno demasiado difícil que les pueda hacer sentir frustrados.
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